Sabemos que ambas, meditación y relajación nos proporcionan un estado fisiológico que favorece a la salud física y emocional. Se ha demostrado que estas técnicas aumentan nuestra salud cardiovascular, mejoran la eficacia del sistema inmunitario, y proporcionan un estado de bienestar.
Los resultados obtenidos con la práctica regular de la meditación y la relajación son esencialmente los mismos. Sin embargo, para lograr estos resultados es necesario practicar el método correctamente y regularmente.
La meditación parece más fácil de realizar: Sentados cómodamente, nos centramos en la repetición (de preferencia mental) de un "mantra" (una palabra que no tienen importancia directa para nuestro intelecto) o nos centramos en nuestra respiración o miramos fijamente el centro de un Mandala.
En la sesión de relajación, nos centramos más en ciertos aspectos físicos y psicológicos, ( por ejemplo relajando nuestro cuerpo parte a parte) y nos conduce al mismo estado de desapego y de bienestar, que se logra a través de la meditación.
Durante una sesión de relajación se comienza por insistir en la tensión física, para abrir las compuertas de la mente y de la sugestión. De hecho, en la relajación se utiliza el estado de desapego mental (relajación total), que abre la puerta del subconsciente y nos permite alimentar el cerebro de sugerencias útiles para el comportamiento y la salud de la persona que practica esta técnica.
En la Meditación no se busca ningún objetivo en particular. Es Estar abierto a la experiencia del momento, del AHORA, cualquiera que sea, sin intentar modificar nada. Los beneficios de está práctica no se buscan de forma voluntaria.
En cambio en la Relajación se busca de manera explicita la relajación física, muscular y emocional. Su práctica está dirigida hacia una meta en particular. Se usa cuando queremos cambiar algo como en la auto-hipnosis, en PNL, Hooponopono etc.
Via ley-atraccion.blogspot.com.es
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