La relajación progresiva de Jacobson

Con el ritmo de vida actual son frecuentes los trastornos de ansiedad y los problemas derivados del estrés. Por eso cualquier técnica que nos ayude a relajarnos y a liberar tensiones es bienvenida. Así, mucha gente se decanta por el yoga para encontrar la tan ansiada armonía entre cuerpo y mente; otras personas prefieren la meditación para llegar al conocimiento de uno mismo desde el interior, y últimamente se está poniendo de moda una técnica de relajación que no es precisamente nueva, pero que está ganando adeptos. Se trata de la relajación progresiva de Jacobson.

En qué consiste la relajación progresiva de Jacobson

La relajación progresiva de Jacobson es un método de relajación que busca la tranquilidad mental y la eliminación del estrés y la ansiedad suprimiendo progresivamente cualquier tensión muscular. Los que han probado esta técnica alaban su eficacia, siendo además capaz de eliminar las contracturas musculares.

El método de relajación de Jacobson se basa en tensar y relajar cada músculo del cuerpo acompañado de ejercicios de respiración. Así cada persona logra tomar el control de la presión y la tensión muscular provocada por el estrés. Desde luego, si se consigue aprender la técnica se trata de un recurso importante para encontrar el sosiego emocional.

Sin embargo, no se trata de un método fácil, sino que requiere práctica y un tiempo de aprendizaje. Los expertos recomiendan acudir primero a un terapeuta profesional que nos guíe en los primeros pasos hasta que consigamos manejar la técnica por nosotras mismas. Pero si quieres conocer de antemano si este tipo de relajación se adapta a lo que necesitas, tenemos algunos puntos básicos para empezar.
Cómo relajarte con el método de Jacobson

Como en cualquier ejercicio de relajación, lo primero es preparar el ambiente. Tienes que conseguir un espacio en el que te sientas cómoda, donde nadie te moleste y con una temperatura y una iluminación moderadas. La posición ideal para practicar la relajación progresiva de Jacobson es sentada en un sillón manteniendo apoyados cuello y espalda.

Sentada en tu sillón y con ropa cómoda y amplia, puedes cerrar los ojos y empezar a hacer ejercicios de respiración profunda. En cada inspiración que hagas piensa en una palabra como "tranquila" y repítela mentalmente cuando expulses el aire. De esta forma irás llenándote de tranquilidad.

Ahora es el momento de ir centrándote en cada músculo de tu cuerpo. Tensa los brazos mientras continúas respirando y luego relájalos. De forma progresiva ve tensando fuertemente para luego relajar de golpe cada parte de tu cuerpo, la pelvis, los muslos, el abdomen, el cuello, la espalda, la mandíbula, etc. Pero mientras lo haces procura concentrarte en las sensaciones que emanan de tus propios músculos.


Via .diariofemenino.com