La verdadera meditación es una práctica que no puede ser definida en términos de pasos concretos a seguir, no hay ningún sitio a dónde ir, excepto el estar aquí y ahora. Es útil dejar de pensar que uno tiene que encontrar y dominar una técnica correcta para encontrar la paz. Dicho esto, me parece que hay unos pocos principios para la práctica de meditación que pueden serle útiles para ayudarle a llegar a su estado natural, pacífico y libre.
1. Reserve por lo menos 25 minutos de tiempo libre. Asegúrese de estar en un lugar tranquilo donde no sea perturbado y siéntese en una posición cómoda.
2. Recuerde que la meditación es su estado natural. No hay necesidad de controlar su mente, respiración o cualquier otro detalle.
3. Tenga conciencia de su cuerpo físico. Comience a notar dónde actúa su conciencia. Deje que la conciencia esté libre en vez de forzarla a algún lugar en particular. ¿Hay sensaciones particularmente frecuentes en su cuerpo interior? Permita que su conciencia esté libre, que sea curiosa y abierta. Cuando surjan pensamientos, déjelos pasar y guíe a la conciencia de vuelta al cuerpo. Observe cómo las sensaciones cambian y cómo la conciencia naturalmente irá a otros lugares de acuerdo con una orientación innata. Permita que la conciencia lo guíe. Esta etapa puede durar un tiempo mientras uno atraviesa varias capas del cuerpo. Una vez más, confíe en la sabiduría del cuerpo mientras lo guía. La conciencia disolverá los patrones de energía en el cuerpo y la mente comenzará a ser menos dominante. Encuentro que este paso es un componente clave para aquietar la mente.
4. Esté atento a lo que va notando.
En otras palabras, usted está consciente de pensamientos, sensaciones y sonidos, etc., pero a medida que los deja pasar, ¿puede notar la presencia? Esta presencia no está en algún lugar de su cuerpo, ni tampoco puede ser definida de forma alguna. Es espaciosa, libre, no cambia ni es afectada por los detalles. Es algo así como el vasto cielo infinito que lo rodea y abarca todo.
5. Manténgase en la presencia. Manténgase en esa conciencia. Cuando encuentre que hay pensamientos o sensaciones o emociones, déjelos pasar. Déjelos en paz y no los entretenga de ninguna manera. Esto desengancha a la conciencia del objeto y a usted lo permitirá experimentar más la presencia.
6. Para entrar en meditación repita los pasos 4 y 5. Concéntrese en un objeto. . . permita que sea tal como es… manténgase consciente. . . concéntrese en un objeto. . . permita que sea tal como es. . . manténgase consciente.
7. Con el tiempo, a la conciencia la captará más rápido. Usted podrá disfrutar de una presencia más profunda por períodos más largos.
8. Pregúntese si de alguna forma está tratando de controlar su experiencia. ¿Está evitando ciertos pensamientos, sensaciones o emociones?
9. 25 minutos es el tiempo ideal mínimo de práctica. A menudo se necesitan unos 15 o 20 minutos para despojarse del trazo persistente de la mente. Si suele acortar su práctica, rara vez tendrá la oportunidad de bañarse en la dulzura de la presencia.
Via lagranepoca.com
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