Es una realidad de estos tiempos que los niños, al igual que los adultos, sufren de estrés o de hiperactividad.
Entonces qué mejor que ayudarlos a vivir su infancia de la mejor manera posible. A continuación te daremos las técnicas de relajación que resultan muy satisfactorias para llevar a cabo este cometido.
En primer lugar, se puede hacer mención de la contracción- distensión, que radica en contraer un músculo o un grupo de músculos unos segundos para posteriormente relajar la contracción paulatinamente.
Relajación infantilEl balanceo es otra técnica que busca imitar el movimiento de un columpio, a modo de vaivén de delante hacia atrás, o de derecha a izquierda. Eso sí, la parte del cuerpo que se está aflojando debe permanecer distendida.
Es una realidad de estos tiempos que los niños, al igual que los adultos, sufren de estrés o de hiperactividad. Entonces qué mejor que ayudarlos a vivir su infancia de la mejor manera posible. A continuación te daremos las técnicas de relajación que resultan muy satisfactorias para llevar a cabo este cometido.
En primer lugar, se puede hacer mención de la contracción- distensión, que radica en contraer un músculo o un grupo de músculos unos segundos para posteriormente relajar la contracción paulatinamente.
Relajación infantilEl balanceo es otra técnica que busca imitar el movimiento de un columpio, a modo de vaivén de delante hacia atrás, o de derecha a izquierda. Eso sí, la parte del cuerpo que se está aflojando debe permanecer distendida.
El estiramiento- relajación tampoco puede dejar de mencionarse puesto que ayuda a estirar progresivamente aquella parte del cuerpo que se encuentra tensa. Se mantiene aquella postura un corto tiempo y luego se vuelve a distender. Esa área del cuerpo se balancea levemente.
Por último, la caída es una forma de dejar actuar a la fuerza gravitatoria sobre el cuerpo. Se debe levantar una parte del cuerpo y luego dejarla caer lentamente, si se puede, resbalando. Hay que dejar descansar esa área por unos segundos y luego repetir la operación dos o tres veces aproximadamente.
Pero antes de comenzar con estos ejercicios se requiere que la educadora esté lo más relajada posible puesto que el estrés puede traspasarse fácilmente a los niños. Estas técnicas además son recomendables para niños de 5 años en adelante. Y es importante considerar las diversidades de cada pequeño ya que todos poseen diferentes tiempos para lograr la relajación.
Resta decir que no se debe obligar a los chicos a realizar estos ejercicios sino que hay que incentivarlos porque la relajación no es más que una actividad voluntaria.
El estiramiento- relajación tampoco puede dejar de mencionarse puesto que ayuda a estirar progresivamente aquella parte del cuerpo que se encuentra tensa. Se mantiene aquella postura un corto tiempo y luego se vuelve a distender. Esa área del cuerpo se balancea levemente.
Por último, la caída es una forma de dejar actuar a la fuerza gravitatoria sobre el cuerpo. Se debe levantar una parte del cuerpo y luego dejarla caer lentamente, si se puede, resbalando. Hay que dejar descansar esa área por unos segundos y luego repetir la operación dos o tres veces aproximadamente.
Pero antes de comenzar con estos ejercicios se requiere que la educadora esté lo más relajada posible puesto que el estrés puede traspasarse fácilmente a los niños. Estas técnicas además son recomendables para niños de 5 años en adelante. Y es importante considerar las diversidades de cada pequeño ya que todos poseen diferentes tiempos para lograr la relajación.
Resta decir que no se debe obligar a los chicos a realizar estos ejercicios sino que hay que incentivarlos porque la relajación no es más que una actividad voluntaria.
Fuente mundohogar.
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