Es el primer error que todos cometemos, esperar a que llegue el fin de semana o el final de día para relajar un poco. Todos los días parece que nos aparece algo que nos deja tensos y estresados, una mala situación en el trabajo, problemas con nuestra pareja, con nuestros hijos, o simplemente que no estamos contentos con la vida que llevamos a diario.
El problema de todo esto está cuando los llevamos a casa y mucho más cuando los llevamos a la cama. Nuestro descanso se queda perdido entre nuestros pensamientos y nuestras preocupaciones.
Lo cierto es, que ya por la mañana parece que estamos dispuestos a esperar por la situación de estrés del día. Nos anticipamos antes de que ella aparezca, resultado: la provocamos. Tienes que estar consciente de que muchas veces el estrés te lo buscas tu. Parece que a tu mente le hace falta esa adrenalina que te genera la preocupación, al punto, que si un día no te pasa nada, hasta te extrañas.
Tu tienes es control sobre tu cuerpo y sobre tus acciones. Solo tu tienes la alternativa de cambiar tus malos hábitos y pensamientos, para mejorar tu calidad de vida. Piensa que la vida pasa en un abrir y cerrar de ojos. Ofrece a tu cuerpo y a tu mente el descanso y la relajación que tanto se merecen. Ellos trabajan para ti.
Te recomiendo que leas los ejercicios que he publicado y que escojas poner en práctica, alguna de esas acciones. Verás que los resultados son satisfactorios. Verás que durante el día cuando te mires al espejo, verás una frente sin ceño fruncido, y unos hombros mas relajados.
Fuente tecnicasderelajacion.org
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