Las técnicas de masajes de origen oriental son de las más célebres en todo el mundo. En la India nacieron decenas de tradiciones que ofrecen alivio a las más diversas dolencias por el mero uso de las manos. El masaje Champi es una de ellas.
La zona del cuerpo sobre la que actúa el masaje Champi es la cabeza (de hecho, Champi significa literalmente “masaje de la cabeza”). Se trata de una serie de técnicas que brindan relajación y ayudan a liberar el estrés. Forma parte del conjunto de prácticas de la medicina ayurvédica de tradición hindú. Cuando se aplica un masaje Champi por lo general se masajea con suavidad el cuero cabelludo, la cabeza, el rostro, el cuello y la parte alta de la espalda y los miembros superiores.
Este masaje terapéutico está recomendado en casos de estrés, preocupación, agotamiento, cansancio físico o intelectual y zumbido de oídos. Al activar diferentes puntos neurálgicos de gran importancia para el ser humano, el masaje Champi ofrece notables mejoras tanto en el estado de ánimo como en la concentración de las personas. Además de promover la claridad de pensamientos, el masaje Champi es sumamente efectivo para terminar con el bruxismo.
Gran parte de los efectos positivos del masaje Champi están asociados a la estimulación de la irrigación de los diferentes centros linfáticos situados sobre la cabeza y el cuero cabelludo. Además de ayudar a liberar toxinas almacenadas en estos centros del organismo el masaje Champi vigoriza el crecimiento del cabello.
Una sesión común y corriente de masaje Champi suele durar entre 25 minutos y media hora. La cantidad de sesiones necesarias como la frecuencia relativa de la terapia en cada caso dependerán del estado actual del paciente y de sus necesidades de curar.
Fuente: blogdefarmacia.com
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