El yoga ha sido considerado como una terapia para la prevención de enfermedades tales como la depresión.
Hace miles de años, los indígenas de la India practicaban el yoga entendido como una forma de vida y toda una filosofía, como un complejo sistema de prácticas morales, espirituales y físicas. Esta disciplina ha evolucionado para adaptarse a la sociedad actual, pero sin perder su esencia inicial.
Muchas personas consideran el yoga como una práctica excelente para mantenerse en forma porque tonifica los músculos, aumenta la flexibilidad corporal e induce bienestar físico y mental. Las sesiones consisten fundamentalmente en la práctica de una serie de posturas y movimientos, seguidos de ejercicios de respiración que finalizan con unos minutos dedicados a la meditación.
Yoga para prevenir
Cada una de las posturas sirve para estimular la circulación de determinadas zonas corporales, mejorando el estado de los órganos y del sistema muscular. El yoga ha sido considerado como una terapia para la prevención de enfermedades, estableciendo un equilibrio entre mente y cuerpo. Las personas con procesos psicológicos como depresión, ansiedad o insomnio suelen recurrir con frecuencia a terapias complementarias, entre ellas, el yoga.
Según una encuesta americana el 7.5% de las personas con depresión que han evolucionado satisfactoriamente han recurrido a la práctica de yoga como medida terapéutica. Parece que los efectos beneficiosos del yoga se deben a la modulación del sistema nervioso y la estimulación del sistema límbico gracias a la meditación. Los beneficios del yoga en el tratamiento de la depresión y en el control de las tensiones diarias ha sido demostrado en numerosas publicaciones.
Un ejercicio para todos
Además, el yoga es un ejercicio que puede ser practicado a cualquier edad, independiente de las enfermedades que se padezcan debido a sus características. De hecho, en la actualidad, la oferta de práctica de yoga para las personas de la tercera edad ha experimentado una aumento llamativo: el yoga consigue mejorar la calidad de vida de los ancianos, porque es un ejercicio que se adapta a las condiciones de cada persona, con movimientos suaves, mejora la autoestima y tiene una influencia positiva en el estado de ánimo. Según los datos disponibles, la práctica de yoga es recomendable para todo tipo de pacientes, independientemente de la edad.
Via portalcantabria.es
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