Dormir lo suficiente es esencial para mantener la salud de tu organismo. La falta crónica de sueño puede aumentar la probabilidad de infartos, irritabilidad y aumento de peso. Este artículo te enseñará cómo bajar después de un día particularmente estresante y te dará algunos consejos para que sepas cómo hacer cambios en tu estilo de vida cambios que mejorarán la calidad de tu descanso.
Toma té de manzanilla. La manzanilla tiene un efecto relajante sobre el cuerpo y las bebidas calientes aumentan ligeramente la temperatura de tu cuerpo, haciéndote sentir somnoliento.
Estírate. Pasa unos 10-15 minutos al día estirando tus brazos, piernas, espalda y cuello sobre una colchoneta. Si no tienes una, utiliza una sábana o un espacio alfombrado de tu casa.
Gira tus hombros hacia atrás. Inspira y exhala profundamente durante algunos minutos.
Toma una ducha o un baño caliente. El calor ayudará a relajar tus músculos, particularmente en tus hombros y cuello.
Utiliza lavanda. El aroma de la lavanda puede actuar como un sedante y te ayuda a relajar tus músculos. La lavanda está disponible en muchas formas: té, espumas para baño, gotas y aceites para el cuerpo.
Intenta relajar poniendo una gota o dos de lavanda debajo de tu almohada.
Viste pijamas cómodos. Si ya tienes puesto el pijama y no consigues quedarte dormido, levántate de la cama y cámbiatelo por otro. Así harás que tu cuerpo se sienta listo para descansar.
Ajusta la temperatura y/o la luz de tu habitación a un nivel óptimo. Mucho frío o mucho calor basta para mantenerte despierto toda la noche.
Via es.wikihow.com
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