Escribir palabras | Relajación

Son muchas las actividades que permiten relajarnos y sentirnos libres cuando las practicamos. El deporte, las visitas a la playa, escuchar música, oír el sonido de la lluvia, ver una puesta de sol… Podemos relajarnos con cualquier cosa o elemento que haga que el tráfico de nuestro cerebro se reduzca, se eliminen pensamientos y actitudes negativas para dejar tu mente en blanco.

Otro de los caminos que os presentamos en este artículo como técnica para relajarse, es el de la escritura. Efectivamente, escribir relaja, nos hace desprendernos de los problemas que nos atosigan, de las preocupaciones que no nos dejan avanzar en un determinado momento y de las negativas que interponemos en nuestro camino.

Escribir es una forma de conectar con nosotros mismos. Consiste en una comunicación interna con nuestro “yo” interior, ese al que escuchamos poco y del que pocas veces queremos saber. Así es, el miedo está presente cuando hablamos de escucharnos desde dentro y de guiarnos hacía lo que queremos de verdad. Soltar nuestras vivencias, emociones, sensaciones en un papel es algo que deberíamos explotar todos y con frecuencia, ya sea con poesía, cuentos, relatos, historias, un diario, una novela, etc.

Y no es que solamente lo piense yo, está demostrado científicamente que escribir es una de las vías eficaces para relajarte. Una investigación publicada en la revista “Science“, confirma que escribir sobre nuestras sensaciones hace que la mente se libere y ayuda a la adquisición de buenos resultados.

Si quieres comprobarlo, intenta escribir algunos renglones a diario. Puede que las primeras veces, te encuentres oxidad@ y pienses que las ideas no te fluyen demasiado, pero si tienes constancia, aunque te resulte complicado, no lo dejes. Conforme pasen los días, verás que la necesidad de “expresarte con la pluma”, crecerá, tus dedos se dejarán llevar y compondrás sobre el papel las ideas y pensamientos que antes estaban concentrados en tu mente y que te provocaban un gran atasco. Con la escritura todos esos pensamientos atascados saldrán y dejarán fluir nuevas y renovadas ideas.

No esperes a otro día, ni siquiera esperes a otro mejor momento, coge papel y bolígrafo y empieza a descargar ideas y dejar paso a otras nuevas.


Via relajacionsinestres.com