El mundo en que vivimos actualmente a veces se parece extrañamente a un torbellino incesante que desencadena una carrera desenfranada contra el reloj.
Los padres, faltos de tiempo, con numerosas responsabilidades y múltiples funciones, a menudo arrastran a sus hijos a un ritmo endiablado en que las pausas no existen o escasean.
La relajación tiene el inestimable mérito de evitar las tensiones y el estrés inútiles y, con ello, permitir a los niños afrontar eficazmente las dificultades encontradas.
Algunas técnicas que favorecen la relajacion pueden aprenderse y aplicarse fácilmente en el día a día de los niños: en casa, en el autobús, en el parque, etc.
Los diferentes ejercicios de relajacion que aprenderán los niños en nuestra consulta, si bien no sustituyen al sueño, les permitirán atenuar la tensión nerviosa y muscular, y favorecerán una mejor recuperación física y una atención más sostenida en las siguientes actividades que tengan que realizar.
Los ejercicios de relajacion, orientados hacia el regreso a la calma, facilitan también los diferentes aprendizajes propios de la educación. Se trata de ejercicios concretos, simples, fáciles de realizar y que no requieren demasiado material. Es posible practicar la relajacion independientemente de las condiciones materiales y es gratificante y eficaz incluso con medios sencillos.
Fuente tupsicologoenvalencia.es
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